Por Angélica Mora Beals
"Tantas veces he mantenido mi esperanza...
Lo hago hoy una vez más, para tratar de emerger de este infierno que es Venezuela.
Luisa, anciana caraqueña.
Nuevamente hay indicios que pueden aportar los ansiados cambios en la Patria de Bolívar.
Hay movimientos subterráneos en las fuerzas armadas e inquietud en el panorama internacional, altamente desfavorables a Nicolás Maduro.
El dictador de Miraflores sospecha que en cualquier momento le puede llegar la hora, recela de todos los que le rodean y no se atreve a salir del país, porque teme que las puertas de Venezuela estén cerradas al regreso del viaje.
Solo confía en la cúpula gobernante cubana y pese a su imagen de que "todo va bien", pide diálogo con Estados Unidos. Los militares venezolanos siguen en desbandada. Desde enero, cientos de nuevos oficiales han desertado y cruzado la frontera hacia Colombia.
Sin embargo, el Golpe de Gracia lo ha dado Juan Guaidó con su exitosa gira por Europa y la bienvenida a Canadá.Washington ha aumentado la presión sobre la dictadura chavista y ese peso lo está sintiendo Maduro y sus compinches
Un duro golpe al Eje Caracas-La Habana ha sido haber perdido Bolivia, un error que los jerarcas cubanos achacan a no haber comprado a tiempo las voluntades de las Fuerzas Armadas, como hizo Hugo Chávez con prebendas a los militares venezolanos.
Maduro trata de salvar lo que le queda, con el robo sistemático de las riquezas de Venezuela y con las milicias, también un plan que inició con éxito Chávez especialmente con los Colectivos. A todo esto, hay temor en La Habana por el compromiso del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de sacar del poder a Nicolás Maduro.
El gobierno de Trump, considera fraudulenta la reelección de Maduro en mayo de 2018 y quiere desalojar al dictador y títere venezolano de un cargo que, según Washington y otros gobiernos, detenta de manera ilegítima. Estados Unidos apoya en ese sentido la lucha de Juan Guaidó, a quien reconoce como presidente interino de Venezuela.
La crisis venezolana ha obligado a millones a buscar refugio en Colombia y otras naciones.
El peso de la tragedia sigue cayendo directamente en Nicolás Maduro, quien solo ha actuado en beneficio del régimen cubano, como tétrica herencia de Hugo Chávez y en desmedro del pueblo venezolano.