Angélica Mora

Nueva York

 

La moral y las buenas costumbres no cuentan hoy en día, especialmente en Estados Unidos. Aquí existe un deterioro progresivo, mayormente auspiciado por líderes políticos. El gobierno está permitiendo, a través de leyes y ordenanzas, conductas criminales en la ciudadanía a lo largo y ancho de la Unión Americana.

Recientemente el fenómeno fue examinado en el programa de televisión ‘Tucker Carlson Tonight’, ‘Esta Noche con ‘Tucker Carlson’ y el conocido comentarista puso el dedo en la llaga en lo que actualmente está ocurriendo en el país. La corrupción en todos los medios es galopante, con una prensa que oculta la verdad por no encontrarla apropiada a las circuntancias políticas.

El caso de la inmigración desenfrenada en los Estados Unidos es altamente alarmante y hay ciudades que gastan 50 millones de dólares en edificios con vista al mar para alojar 50 personas sin hogar. En su mayoría, los hoteles ven sus habitaciones destruidas por quienes son reubicados allí por el gobierno.

Lo paradójico del caso es que políticos, que apoyan a los indigentes, viven lejos del drama, en comunidades con rejas y guardia a la puerta... y no permitirían como vecinos, a un necesitado.

Mientras tanto, miles de ilegales proveniente de América Central y otros países ocupan los lugares en la calle que dejan los recién ubicados, en un ciclo de nunca acabar. Muchos desamparados no entran en los programas de las clínicas de rehabilitación y se mantienen en drogas, muchas veces apoyados por el Estado que proporciona sitios para inyectarse, bajo la vigilancia de enfermeras especializadas.

Pero el mayor deterioro en los cambios de la sociedad estadounidense se ha visto reflejado, recientemente, en fotos y videos que muestran miles de cajas vacías tiradas en a las vías ferroviarias en el condado de Los Ángeles, en California.

Esos envases son reflejo del asalto permanente a los vagones de carga que llevan paquetes de empresas como UPS, Amazon y FedEx y otras compañias. Grupo de ladrones han estado robando contenedores de carga de trenes que se aproximan al centro de Los Ángeles. Desde hace meses asaltan y se llevan paquetes que pertenecen a personas en todo Estados Unidos y dejan las vías férreas cubiertas de cajas desechadas.

Los numerosos objetos descartados incluyen material que los ladrones, al parecer, no creían que fueran valiosos como para llevárselos.
Las escenas aumentaron a fines del año pasado, cuando la televisión mostró miles de cajas desechadas a lo largo de las vías que pasan a un costado de campamentos de indigentes al noreste del centro de la ciudad. Los trenes que pasaban transportaban contenedores que tenían las puertas totalmente abiertas y los paquetes cayéndose a las vías. Un video mostró a dos hombres, uno de ellos sujetando lo que parecía un cortacadenas, caminando por los rieles.

La compañía ferroviaria Union Pacific dijo en un comunicado que a la empresa le preocupa grandemente, el incremento de los robos de carga en California. “Hemos aumentado el número de agentes especiales de Union Pacific que patrullan, y hemos utilizado y examinado tecnologías adicionales que nos ayuden a combatir esta actividad criminal. Asimismo continuaremos trabajando con nuestros socios de la policía local y dirigentes elegidos con ese propósito”.

Amazon dijo que remitía las preguntas a la policía. United Parcel Service declinó hacer declaraciones en torno a las investigaciones sobre los robos de carga, pero señaló que estaba cooperando con las autoridades. “La seguridad de los bienes de nuestros clientes y nuestros empleados es nuestra máxima prioridad”, manifestó UPS en un comunicado.

Añádase a esa debacle, la ola de robos relámpago que están asolando a las tiendas de lujo en algunas de las principales ciudades de Estados Unidos, donde turbas de ladrones se llevan artículos en asaltos nocturnos y diurnos.
Los robos tuvieron lugar después de una serie de incidentes similares ocurridos en la zona de la bahía de San Francisco. Un grupo de ladrones asaltó un centro comercial y, con martillos, rompió las cajas de una joyería antes de coger los artículos y huir. Los robos son ejecutados en su mayoría por menores de edad, porque la ley contra ellos no se aplica y han aumentado dramáticamente desde que fiscales izquierdistas anunciaron aplicarían sanciones leves a los delincuentes.  

La integridad, el honor y la honestidad están perdidos y los ejemplos en el mundo se multiplican por falta de educación en los hogares, en las aulas y en la administración pública.