'Lo dije y lo repito: no van a robar ningún trabajo a los médicos italianos', se defiende de las críticas el presidente de Calabria, Roberto Occhiuto.

Un grupo de 120 médicos cubanos arribó el jueves último a la provincia de Calabria, al sur de Italia, donde ya trabajan al menos 51 más desde diciembre pasado, en lo que supone la expansión del lucrativo negocio de exportación de profesionales que La Habana reconoce le aporta dividendos significativos.

De acuerdo con Roberto Occhiuto, presidente de la región italiana que ha recurrido a los sanitarios de la Isla ante la escasez de profesionales que sufre esa región, los cubanos están contratados en cuatro hospitales calabreses.

"Comenzarán a trabajar junto con médicos italianos ya en agosto", escribió el funcionario en su muro de Facebook. "Las batas blancas del primer contingente han demostrado que tuvieron una gran experiencia, ampliamente apreciada tanto por los médicos italianos que trabajaron con ellos como por los pacientes en los hospitales a los que atendieron", agregó.

"Lo dije y lo repito: no van a robar ningún trabajo a los médicos italianos —y, de hecho, las competiciones avanzan rápidamente— pero nos ayudarán a mantener abiertos los departamentos y hospitales", enfatizó, en referencia a las críticas que esa contratación recibe en el gremio médico italiano.

Los señalamientos trascendieron y llegaron al Parlamento Europeo, cuando un grupo de diputados envió una carta a Occhiuto, en la que denunciaron las condiciones en que trabajan los médicos, con contratos que violan sus derechos humanos y laborales.

Laura Ferrara, integrante de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior del Parlamento Europeo, dijo en un comunicado de prensa a propósito de la carta que "el asunto de los médicos cubanos en comisión de servicio en Calabria tiene demasiadas zonas grises".

De acuerdo con la eurodiputada, "además del riesgo de violación de los derechos humanos y de explotación laboral, existen fuertes dudas sobre las garantías de calidad de la asistencia que prestarán los médicos cubanos. También está en juego la protección de la salud de los ciudadanos calabreses".

 

En la misiva, a propósito del anuncio de la contratación de 497 médicos cubanos por parte de las autoridades de la Región de Calabria a través de la estatal Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos S.A., un negocio que fue mantenido en secreto hasta la firma del acuerdo, los eurodiputados denunciaron la violación de los derechos humanos y laborales de los médicos en el contexto de contrataciones similares en decenas de países del mundo.

 

Curiosamente, ni la embajadora de La Habana en Italia, Mirta Granda, ni esa sede diplomática, hicieron referencia en sus redes sociales a la llegada del nuevo grupo de profesionales. Tampoco los medios oficiales cubanos lo reportaron.

De acuerdo con la eurodiputada, "además del riesgo de violación de los derechos humanos y de explotación laboral, existen fuertes dudas sobre las garantías de calidad de la asistencia que prestarán los médicos cubanos. También está en juego la protección de la salud de los ciudadanos calabreses".

En la misiva, a propósito del anuncio de la contratación de 497 médicos cubanos por parte de las autoridades de la Región de Calabria a través de la estatal Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos S.A., un negocio que fue mantenido en secreto hasta la firma del acuerdo, los eurodiputados denunciaron la violación de los derechos humanos y laborales de los médicos en el contexto de contrataciones similares en decenas de países del mundo.

Curiosamente, ni la embajadora de La Habana en Italia, Mirta Granda, ni esa sede diplomática, hicieron referencia en sus redes sociales a la llegada del nuevo grupo de profesionales. Tampoco los medios oficiales cubanos lo reportaron. El Parlamento Europeo condenó las misiones médicas cubanas en el extranjero como una forma de esclavitud en una resolución del 10 de junio de 2021.

Los europarlamentarios advirtieron además que "de los 4.700 euros mensuales en concepto de salario, solo 1.200 euros serán pagados directamente por la Región a cada profesional, mientras que los 3.500 euros restantes serán pagados a la Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos S.A. Es decir, la mayor parte del salario (aproximadamente el 75%) se retiene en beneficio de una empresa que ejecuta la voluntad del Gobierno cubano".

En el texto, enviado también al comisario en funciones de Salud Regional y Emergencias Sanitarias de Calabria, los eurodiputados recordaron que "los presidentes de la Orden de Médicos y Dentistas de Calabria han expresado su gran preocupación por las garantías de calidad de la asistencia que prestarán los sanitarios cubanos".

"A pesar de la incuestionable escasez de personal sanitario que opera en Calabria, es inaceptable que se ponga remedio a este problema contratando a personal sanitario cubano mediante métodos y condiciones que corren el riesgo tanto de socavar la protección de la salud de los ciudadanos, como de convertir a la región en partícipe de graves formas de explotación laboral y esclavitud moderna", añadieron los políticos europeos.

Las misiones médicas del régimen cubano han sido denunciadas por la Organización de Naciones Unidas (dos veces en los últimos tres años), la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y las ONG Prisoners Defenders, Human Rights Watch y Human Rights Foundation, las cuales han preparado informes que revelan cláusulas abusivas en los contratos de los profesionales de la Isla exportados.

El "grado de esclavitud" que sufren estos profesionales es tal que, "si dejan su trabajo, se les considera 'desertores', de tal manera que si se encuentran dentro de Cuba cuando esto ocurre, el Código Penal vigente (Art. 176) les reserva ocho años de prisión, mientras que si la 'deserción' se produce estando en el extranjero, se les prohíbe la entrada a Cuba durante ocho años, lo que ha provocado que miles de niños en Cuba se hayan quedado huérfanos forzadamente por acción de las autoridades, una situación denunciada por el Comité de los Derechos del Niño de la ONU el pasado mes de junio", indicó Prisoners Defenders en un comunicado a propósito de la carta de los eurodiputados.

Desde que La Habana perdiera varios mercados para sus profesionales exportados, con el cierre de sus grandes "misiones" en países como Brasil, Bolivia y Ecuador, ha buscado nuevos destinos para sus sanitarios. Durante 2020 y 2021 la pandemia del Covid-19 le permitió enviar grupos por breve tiempo a más de 20 países, incluidos Andorra e Italia.

Los servicios de salud humana y de atención generaron al Gobierno 3.997.948,3 de los 6.879.664,9 millones de pesos ingresados en 2020 por el concepto de exportación de servicios, según cifras oficiales. La Salud fue exactamente el 58,1% de ese total. A pesar de ello, La Habana insiste en que sus "misiones médicas" son expresión de su "vocación internacionalista" y parte del propósito "humanista" de la Revolución.

Ello, mientras crecen las denuncias de doctores, enfermeras y otros especialista de salud por las condiciones de esclavitud a la que son sometidos en las llamadas "misiones".

La violación de los derechos humanos de los médicos cubanos enviados al exterior ha sido ampliamente documentada y denunciada. Una investigación publicada por DIARIO DE CUBA en 2018 reveló a nivel mundial los mecanismos usados por el régimen cubano en la exportación de médicos a Brasil.

Otra investigación más reciente de este mismo periódico, en colaboración con la organización de periodismo CONNECTAS, obtuvo pruebas del modus operandi en otros países. Prisoners Defenders ha obtenido desde 2019 hasta hoy más de 1.800 testimonios de víctimas que describen condiciones laborales de esclavitud moderna en "misiones" en 47 países entre 2002 y 2022.

https://diariodecuba.com/cuba/1691228844_48981.html