Wendy Lazcano
Diario de Cuba
Dos de las principales economías de América Latina viven procesos electorales y un auge de los movimientos opositores que ponen en riesgo la permanencia de los gobernantes actuales.
Las elecciones en México y Argentina auguran un cambio de signo que terminaría la relación de amistad de esos gobiernos latinoamericanos con el cubano. Expertos en la política de esos países, dos de las economías más potentes de América Latina, advierten sobre los posibles resultados de estos procesos electorales que se realizarán en meses próximos.
En México Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no puede volver a presentarse a la Presidencia y la candidata de la oposición, Xochitl Gálvez, se fortalece. En Argentina la crisis económica ha avivado la popularidad del ultraderechista Javier Milei, quien ganó las elecciones primarias y reduce la posibilidad de continuidad del oficialismo, representado por el presidente Alberto Fernández.
Las elecciones en México y Argentina auguran un cambio de signo que terminaría la relación de amistad de esos gobiernos latinoamericanos con el cubano. Expertos en la política de esos países, dos de las economías más potentes de América Latina, advierten sobre los posibles resultados de estos procesos electorales que se realizarán en meses próximos.
"La cooperación entre Cuba y México se ha fortalecido con el beneplácito de funcionarios mexicanos que hacían turismo revolucionario en la Isla. Cuando estos jóvenes se convirtieron en importantes políticos en México, el Gobierno cubano comenzó a cobrar. Es una táctica que conocemos de la dictadura cubana, hace favores y luego 'ordeña la vaca'", dijo Cortés.
En Argentina el antisistema Milei, uno de los candidatos de la oposición, es el favorito para las elecciones presidenciales de octubre. Si el ultraderechista ganara, el Gobierno cubano perdería otro aliado en la región.
Gabriel Salvia, presidente del Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL), vislumbra que Milei no va a ser contemplativo con la dictadura cubana, como lo ha sido el actual gobierno, que llegó al poder por una coalición de izquierda.
"Si Milei se hace con la presidencia va a tener un estilo confrontativo de denuncia, más duro, menos diplomático, pero no sé si eso va a ayudar a un reclamo de cambio en Cuba", advierte Salvia.
Analistas en Argentina han avizorado que el partido gobernante va a perder las elecciones por la crisis económica que sufre el país.
"Milei es una persona polémica en redes sociales, dice no tener partido. A pesar de sus resultados prometedores, veo difícil la gobernabilidad. Tiene dos diputados de 257 y no tiene ningún senador. Sin apoyo parlamentario está difícil que pueda hacer algo. Además, sus ideas no se aplican en ningún lugar del mundo", añade el analista argentino.
En México sucede algo parecido; hay un entusiasmo popular por el ascenso de la oposición, pero es discutible que le alcance para ganar. La maquinaria estatal podría frenar a Xochitl Gálvez, según Cortés.
"En los últimos cinco años la institucionalidad democrática de México ha dejado de existir. El presidente es dueño de todo y ya anunció que abriría una investigación contra Gálvez", dijo Cortés.
La expansión del poder del Ejército en la vida civil, la sospechas de alianza del Gobierno de López Obrador con el narcotráfico y la escasez de medios de comunicación críticos, también son cartas que juegan en contra de Xochitl Gálvez. En La Habana están pendientes de lo que suceda.
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