El mandatario más joven que ha tenido ese país también enfrenta protestas en el sector del transporte.
Gabriel Boric, que había llegado con altas expectativas para gobernar Chile, parece desinflarse en su popularidad de acuerdo a la encuesta que hace la firma Cadem todas las semanas, informó el diario Semana.
Las medidas que implementa el nuevo Gobierno parecen no agradan a la ciudadanía, que parece cada vez más crítica con la gestión del mandatario. Según la encuesta, el nivel de aprobación del presidente ha caído al 36% y ya un 53% de las personas cuestionan su gestión.
A esto se le suma que el 62% cree que el país va por mal camino, 11 puntos más que hace un mes, y por primera vez son más quienes se muestran pesimistas que optimistas sobre el futuro.
También la Convención Constitucional constituida en Chile para redactar una nueva Carta Magna sigue perdiendo apoyo entre la ciudadanía. Según el mismo sondeo, la confianza en este órgano está en el nivel más bajo desde que echó a andar, algo que el propio Boric reconoció con preocupación, a cuatro meses y medio para que se celebre el referéndum.
El nivel de desconfianza en la Convención ronda el 57%, mientras que el apoyo a ese proceso cae al 41%, según la Encuesta Plaza Pública Cadem, que por ahora se inclina también hacia el "no" al borrador. 46% de los encuestados anticiparon que rechazarán el plebiscito, frente al 37% que diría "sí".
Boric declaró que le preocupa la desafección hacia un proceso que Chile anticipaba como clave para sortear la crisis política y social desatada tras las protestas de 2018. El borrador incluye ya casi 300 artículos, entre los que figuran una apuesta por las regiones o el derecho a la vivienda.
A todo lo anterior se suma que pequeñas agrupaciones de camioneros se manifestaron en distintos puntos del país con bloqueos parciales de rutas por una serie de demandas, entre ellas mayor seguridad en los caminos, mejores condiciones laborales y una rebaja en el precio de los combustibles.
El miércoles Boric viajó a su región natal de Magallanes, en su segundo viaje oficial al interior del país tras la visita que en abril realizó al norte, donde tratará de difundir desde el terreno todas las medidas sociales que en medio de la vorágine ha impulsado el Ejecutivo en busca de la recuperación económica, entre otras actividades.
"Me interesa recorrer la mayor cantidad de lugares posibles en Chile para traer ojalá buenas noticias, pero también para escuchar. Y, en esto, las ideologías quedan atrás. Acá yo soy el Presidente de todos los chilenos y chilenas", señaló Boric en Coquimbo, citado por EFE, en su primer recorrido al interior, una de las promesas que hizo en campaña.
Llevar a buen puerto el proceso constituyente, junto con concretar reformas estructurales que apuntan a la construcción de un Estado de bienestar parecido al europeo, se perfilan como los desafíos más grandes de su periodo, además de enfrentar la violencia en el sur del país y la crisis humanitaria derivada de la migración irregular en el norte.
En este sentido, desde su gabinete se insistió en que el presidente está tranquilo y que su objetivo es mantener el contacto y el pulso de la calle, escenario en las últimas semanas de varias protestas, algunas de las cuales han desembocado en violencia de grupos radicales.
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