Zoila Cecilia Méndez

 

Nota del Editor

Comparto con nuestros lectores este poema que me fue enviado por la cubana Zoila Cecilia Méndez , lectora de La Nueva Nación. También les adjunto la nota con la que acompaña el poema esta distinguida y sensible compatriota. Yo me he tomado la libertad de poner título al poema. El Editor

"Estimado Sr. Alfredo Cepero.   parece que en estos días de tantos tormentos y situaciones inconcebibles en este pais, de repente salen a relucir sentimientos y recuerdos que nosotros, los cubanos exilados, llevamos dentro … " Se acerca la madrugada…”  me hace un nudo en la garganta.   No solo usted, con su maravilloso y sentido escrito, sino también en Facebook estan saliendo imagines de nuestra Cuba, de nuestra gente de antes, de nuestra cultura, herencia y mas… parece que todos aquellos que lograron traerse fotos y recuerdos cuando se fueron, los están compartiendo ahora por Facebook. Hay una tremenda añoranza  en el ambiente… no se por qué.

Y no se por qué me atrevo a enviarle dos pequeños poemas míos que confirman los sentimientos expresados en su artículo, y que me vienen a la mente a cada rato en estos días".

 

“A las seis de la mañana se levanta el sol de Cuba.

Poco a poco van saliendo los guajiros de sus tumbas

y niños de sombra y barro, y de lagrimas maduras…

Las carretas se abren paso de los potreros al río;

van cargadas de sudor y de llanto de bohío

y siguen su andar de andares a lo largo del camino.

Crujen las pesadas ruedas−siempre por los mismos trillos−

ese monótono ruido es el canto del guajiro, que no conoce

otra cosa más que el cansancio y el hastío.

Ay, campos de Cuba tristes, de sinsontes por el trigo

y de plátanos caídos…

Ay campos de Cuba tristes, de amaneceres sin soles

y de atardeceres grises…”

(Santiago de Cuba, 1961)